El mediojuego suele comenzar cuando todas las piezas se han desarrollado y los reyes se han puesto a salvo. Esta es la parte en la que se pone a prueba la comprensión de la posición por parte de cada jugador.
Para los jugadores que intentan mejorar, estudiar esta parte es crucial para su desarrollo posterior. Entonces, ¿por qué es tan importante el mediojuego y por qué debería estudiarlo?
He aquí algunas razones:
1. Mejorará su comprensión general del ajedrez
Cada partida que juegues, cada nueva idea que veas te ayudará a ampliar tus conocimientos de ajedrez y tu comprensión general. Hay innumerables ideas en el mediojuego que sólo puedes aprender si repasas muchas partidas y luego intentas aplicarlas por tu cuenta. Cuando estudie una partida y preste atención a lo que hacen los jugadores en el mediojuego, siempre encontrará más de un tema. Puedes aprender nuevas ideas posicionales, por ejemplo, pero la misma partida puede tener algunas jugadas profilácticas interesantes o un bonito golpe táctico para rematar la partida.
2. Medio juego: Aprendes a jugar con diferentes estructuras de peones
Uno de los factores más importantes en el mediojuego es la estructura de peones. Diferentes estructuras requieren diferentes planes y colocación de piezas. Si no sabes cómo manejarlas, es fácil elegir el plan equivocado y caer en una posición peor. En primer lugar, debe estudiar las estructuras que más juega. Una vez terminada la apertura, es el momento de maniobrar e intentar romper la posición del rival. Si ha visto las ideas antes, es fácil aplicarlas en sus propias posiciones. También ahorrará mucho tiempo, ya que no perderá el tiempo preguntándose qué camino tomar y decidiendo entre varias jugadas. Ya sabes qué plan es el correcto y vas a por él, sin más.
Aparte de las estructuras que juegas, hay otras importantes que suelen aparecer una y otra vez en las partidas y que necesitas entender cómo jugar. Por ejemplo, el peón de dama aislado es una de las principales y todo ajedrecista debería conocer los planes típicos para ambos bandos: el que lo tiene y el que juega contra él.
3. Aprenda los patrones posicionales más importantes
La comprensión posicional suele ser lo que marca la diferencia entre un jugador fuerte y un aficionado, y trabajar en este aspecto podría ser lo que necesita para mejorar en ajedrez. Cuando trabajan por su cuenta, la mayoría de los ajedrecistas tienden a centrarse en la táctica y la apertura, mientras que la estrategia queda ligeramente relegada. Un jugador fuerte y experimentado sabe cómo utilizar las pequeñas ventajas de una posición y cómo presionar para conseguir más.
Uno de los pasos más importantes en el aprendizaje de la estrategia es comprender las debilidades y cómo usarlas a tu favor. Una casilla débil o un peón débil pueden bastar para ganar una partida si se juega la posición de la forma correcta. Otros patrones posicionales imprescindibles son cómo jugar con la pareja de alfiles (¡y contra ella!), cómo jugar en posiciones con alfiles de colores opuestos, posiciones con alfil contra caballo y cómo jugar con la mayoría de peones del flanco de dama.
4. Medio juego: Aprenda a manejar los intercambios
El intercambio de piezas es un tema difícil para todos y entender qué piezas deben irse y cuáles deben quedarse jugará un papel importante en su desarrollo como ajedrecista. En todas las partidas, el intercambio de piezas es inevitable.
Sin embargo, esto no debe hacerse de forma automática y es importante elegir el momento adecuado, así como las piezas adecuadas para el intercambio. En general, lo mejor es quedarse con las piezas activas y deshacerse de las pasivas.
Pero, en realidad, las cosas son más complejas que eso. Los intercambios también pueden depender de la estructura de peones, de si el centro está cerrado o abierto y de la seguridad del rey.
5. Aprendes nuevas ideas que luego puedes utilizar en tus partidas
Cuando jugamos, intentamos utilizar ideas que hemos visto antes en partidas entre Grandes Maestros. Hay maniobras o ideas que puedes encontrar en una partida simplemente porque las has visto antes.
Por lo tanto, sabes que funcionan en un tipo específico de posición. Esto se llama reconocimiento de patrones. Los juegos clásicos pueden ofrecer mucha inspiración y enseñarte nuevas formas de pensar. Un ejemplo famoso que me viene a la mente es la partida entre Janowski y Rubinstein.
En ella, Rubinstein, con las piezas negras, encontró una forma inusual de activar su dama:
¡En esta posición, Rubinstein jugó 29…Dd8! Con la espectacular idea de mejorar su dama vía b8-a7 y finalmente a c5.
6. Estudiar las partidas de mediojuego también te enseñará mucho sobre táctica
Aprendes a utilizar diferentes motivos tácticos que ya conoces.
Pero siempre puedes descubrir nuevas formas de utilizarlos. Ayuda a desarrollar tu imaginación, para que puedas tender trampas ingeniosas y encontrar ideas ocultas en tus partidas.
7. Las tácticas también pueden presentarse en forma de sacrificios, que también puedes aprender estudiando muchos de ellos
La mayoría de la gente está familiarizada con los típicos, por ejemplo, el sacrificio del Regalo Griego, el sacrificio del doble alfil o el sacrificio en f7, pero pueden darse de muchas formas. Normalmente se aprende la forma típica de ejecutarlos, pero estudiando el mediojuego se descubren nuevas ideas que pueden resultar útiles durante la partida.
El sacrificio en h7 es un buen ejemplo, ya que no conduce necesariamente a una victoria forzada. A veces sólo puede dar un ataque muy fuerte que, si se juega correctamente, conducirá finalmente a una victoria.
Sin embargo, cuando estás jugando la partida no tienes la certeza de que vaya a funcionar; tienes que evaluar correctamente la posición resultante. Cuantas más ideas de mediojuego vea, más fácil le resultará esta tarea.
8. El medio juego: Atacar no es sólo sacrificarse
A veces, ni siquiera requiere sacrificar. Tienes que saber cómo colocar tus piezas, los principios generales en el ataque y qué peones avanzar. Y también cómo abrir al rey del rival.
Se puede aprender mucho estudiando las partidas de fuertes jugadores de ataque. Por ejemplo, Judit Polgar, Garry Kasparov y Alexander Alekhine.
9. Estudiando muchas de ellas, aprenderá que las posiciones igualadas no son necesariamente tablas
Incluso la ventaja más pequeña puede ser suficiente para ganar la partida si sabe cómo luchar por más y apretar poco a poco a su rival. Eche un vistazo a las partidas de Anatoly Karpov, Ulf Andersson o Magnus Carlsen.
Así aprenderá a ser paciente, a mantener a su rival bajo presión y a «engañarle» para que cometa errores que pueden costarle la partida.
10. El medio juego: La iniciativa es un concepto importante en ajedrez
Sólo estudiando muchas de ellas se puede entender cómo jugarlas. Y también cómo usarlas
La iniciativa pertenece al jugador que puede hacer amenazas que no pueden ser ignoradas. De esta forma, pone al rival a defenderse de estas amenazas, no pudiendo realizar jugadas que cumplan un determinado plan propio. A veces, incluso puede llegar a ser más importante que el material. En la práctica, defenderse no es fácil y después de un tiempo bajo presión los jugadores tienden a cometer errores que pueden costarles la partida.